Según informó a Efe la responsable del proyecto, Susana Lacalzada, el proyecto tiene un coste de 2,5 millones de euros, que se financiarán, al 50 por ciento, entre la UE y los socios que participan en él.
Junto al Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Industriales de La Rioja, participan en este proyecto la Cámara Oficial de Comercio e Industria de Zaragoza; la Fundación San Valero de Zaragoza; el Ministerio de Medio Ambiente de Austria y la empresa Europa, Innovación y Desarrollo.
Los cinco puntos de recarga, que serán abastecidos por energía renovable, estarán operativos en el plazo de dieciocho meses y se ubicarán en el Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de La Rioja, polígonos industriales de Zaragoza y la Universidad San Jorge de Zaragoza.
La prueba piloto se hará con más de cincuenta vehículos eléctricos, que se recargarán en estos puntos de una manera gratuita hasta finales de 2013, que es el período de vigencia del proyecto.
Al tratarse de una recarga con energías renovables, explicó Lacalzada, el proyecto plantea conseguir una rentabilidad mediante la reducción de más de cien toneladas al año de CO2.
La idea de esta iniciativa, añadió su responsable, se gestó hace dos años, cuando el coche eléctrico era "un prototipo".
El Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Industriales pensó en las posibilidades de futuro de estos vehículos, que actualmente se han convertido en una realidad, sobre todo para circular por ciudad, aunque su mayor "hándicap" es que los edificios de viviendas no están habilitados para un punto de conexión para enchufar en garaje.
El proyecto pretende ser un punto de referencia para la transición a los vehículos eléctricos que se recarguen con energías renovables, de forma que se establezca una red europea de empresas e instituciones comprometidas con esta tecnología, concluye su responsable.
