Campos baldíos inmensos transformados en productores de electricidad. El crecimiento que está teniendo la energía solar en la región es extraordinario y ha llegado el momento de la modalidad más eficiente y extensiva, la solar térmica.
En ésta la radiación del sol calienta un aceite sintético que a su vez convierte el agua de un circuito en vapor y finalmente el vapor produce electricidad en una turbina.
El consejero de Industria, Energía y Medio Ambiente, José Luis Navarro, señalaba este verano que Extremadura tiene ya tres plantas termosolares en construcción y en 2009 «posiblemente» habrá ocho, «más que ninguna otra comunidad autónoma», todas las cuales estarán en funcionamiento en 2011.
Llega ahora en firme otro nuevo proyecto, el que llenará en Navalvillar de Pela con espejos solares una extensión equivalente al terreno de juego de 150 campos de fútbol, un espacio de algo más de un millón de metros cuadrados.
A información pública
La empresa promotora es Planta Termosolar de Extremadura S. L. con domicilio social en Madrigalejo, y acaba de pedir autorización administrativa a la Junta, a la que ha presentado un estudio de impacto ambiental, todo lo cual se encuentra en período de información pública desde el pasado viernes.
La técnica termosolar suministra mayores producciones de electricidad pero necesita inversiones más cuantiosas, en este caso de Navalvillar la inversión anunciada total es muy elevada, 413,056 millones de euros, de los 216,2 millones van a una de las plantas y 196,8 a la otra.
En ambos casos la potencia instalada va a ser de 49,9 megavatios sobre una extensión total de 104,6 hectáreas.
360 gigavatios al año
La producción total anual estimada en el proyecto es de 360 gigavatios/hora (Almaraz produce 44 veces más), capaces en teoría de cubrir el suministro de 60.000 hogares.
Los espejos de forma cilindro parabólica concentran la radiación solar y la transforman en energía térmica mediante tubos absorbedores y circuito de aceite sintético; este fluido se almacena en tanques con sales fundidas y el calor es apoyado con tres calderas de gas para producir vapor a 370 grados. El vapor va a una central de generación por turbina.
Todos esos equipos van duplicados (uno por cada planta de 49,9 MW), así como la subestación que transforma la tensión de la electricidad para su transporte dentro de la instalación, transporte que se efectúa con cuatro kilómetros de línea subterránea.
Estos dos parques, Termosol 1 y Termosol 2, cuentan con una subestación principal que concentra la energía procedente de ambas plantas, y de ahí la electricidad llega a la red general nacional en Valdecaballeros (Red Eléctrica Española) mediante una línea aérea de alta tensión, 220 kilovoltios, con dos trazados posibles, uno de 38 kilómetros de longitud y otro de 47,7.
Previamente una subestación en Valdecaballeros eleva la tensión de 220 kilovoltios a 400 para su transporte por Red Eléctrica Española.
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9/9/08
Navalvillar de Pela: Piden permiso para una termosolar que ocupa 150 campos de fútbol
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