16/10/08

Un estudio demuestra que la energía renovable abarata costes en industria agroalimentaria

El uso de energías renovables como la biomasa, la energía solar térmica o la geotermia en la industria agroalimentaria rebaja los costes de producción al reducir el coste energético, ya que el grado de eficiencia energética adquirido puede llevar a un descenso del consumo de entre el 10 y el 30%.

Así se recoge en un estudio presentado hoy por la Asociación de Industrias Agroalimentarias Consebro y por ACCIONA que, respaldado además por el Gobierno de Navarra, analiza la Viabilidad de aplicación de energías renovables en la industria agroalimentaria, para lo que se ha trabajado con 14 empresas, a las que se ha visitado, entrevistado y estudiado la metodología de producción.

Según ha señalado Consebro en una nota, las empresas pertenecen al conjunto de subsectores que componen el sector agroalimentario, por lo que el estudio se hace extensivo al conjunto del sector.

El origen del estudio fue el importante consumo energético existente en las empresas agroalimentarias, los sistemas de combustión tradicionales, el incremento continuo del precio de los combustibles y la necesidad de disminuir las emisiones de CO2 a la atmósfera.

Con estas premisas y a lo largo de este año de trabajo en común, ambas organizaciones han trabajado en estas 14 empresas del sector de Navarra, donde se han estudiado su situación, los consumos energéticos y las necesidades de energía para mantener la producción.

Así, las mismas fuentes concluyen que la industria agroalimentaria sigue utilizando métodos de transformación de la energía convencionales con la finalidad de suplir las necesidades térmicas en el proceso, que se basaría prácticamente en la producción de vapor y en la gestión de este.

En el estudio llevado a cabo de manera conjunta por Acciona y Consebro se ha tratado de analizar distintas empresas con diferentes sistemas productivos con el fin de buscar aplicaciones de energías renovables a los procesos de producción, y se ha trabajado sobre alternativas como la biomasa, la energía solar térmica o la geotermia.

La utilización de este tipo de energías renovables en el conjunto de la industria agroalimentaria, al igual que en el resto de sectores no está muy introducido, sin embargo se han estudiado como las más idóneas.

Consebro y Acciona han pretendido a través de este estudio demostrar cómo es posible lograr un aumento de la competitividad del sector, en comparación con otras zonas productivas, introduciendo energías renovables, y se ha advertido que con su introducción se logra disminuir los costes de producción al disminuir el consumo energético, de forma que el grado de eficiencia energética adquirido puede llevar a una disminución del consumo de entre un 10% y un 30%.

Vía>>